En Charlton Park monjes tibetanos se descuelgan por un arpa de doce pisos.Emiten sonidos guturales traìdos de guturalia, con sus sombreros dorados y rampantes y hacen que caiga nieve en Benidorm. Un grupo de tuaregs embozados vuela en alfombras por los desiertos fónicos enchufados a camellos que Aladino convirtió en guitarras eléctricas."Son De La Frontera", copazo de Garvey en la mano, navajazo por bulerías y tengo arte en la entrepierna...cuando surge el arrebato, lo dan todo.
Un ángel desdentado de nombre Sean, de apellido Mc Gowan, líricanta canta lo mejor de los Pogues y me hace feliz.También tengo la oportunidad de pasar el rato con Amanda King: una madurita de buen ver que es artista y está al cargo de la zona de los peques y a la que conocí en el Mango Landin cuando la ayude a pintar el techo y no podía dejar ed mirarla subida a la escalera que yo sostenía y a sus shorts tejanos, tan cortitos....Una vida aventurera a tope por el mundo overland. Ahora vive en Australia y también está al cargo del Womad de allá.
Todo esto y más en el Womad.
En los puestos hay uno que vende cuerdas vocales y en el "Insect Circus" los hombres domesticados por las cucarachas y las libélulas, hacen alarde de sus acrobacias atravesando aros de fuego crepuscular.
40 gigantescos tambores llegan desde el sol naciente, y las mujeres de Kobayasi se emplean a fondo. Descargan sobre ellos toda su energía con enormes falos de madera. Fluye el magma de las entrañas de la tierra,seminálmente.
Los Èmulo y Rèmulo de Manu Chao y Eric Cantona arremeten con su banda de despellejados en otro "circo globalia".La gente baila sin parar cuando ruge la marabunta. Tambièn hay hombres de la sabana que soplan baobabs y las canciones traen remotos recuerdos de por allá, en el umbral de los tiempos.
Curtis, el feriante de la vanidades, exhibe máquinas que predicen terremotos en otros planetas y "La Gran Betty" escupe tu futuro desde su urna de cristal en un papel mojado.
Un alfeñique con una gran vis cómica sin ser un artista contratado, levanta la pesada maza y la piel estirada de su cuerpo deja ver el saco de costillas, el esqueleto, en la atracción: "Yo Soy El Mas Fuerte". Cuando cae con todo su peso, se le desparraman las fuerzas y las gafitas de Oxford vuelan por los aires entre carcajadas del populacho festivo. La pesa que marca los puntos apenas se eleva unas décimas y la campana se troncha de la risa, tía Felisa.
Un grupo de aspavientos y tragacorcheas deleitan al personal en la noche cernida de estrellas. En otro lugar, un hombre y una mujer se desnudan emocionalmente a latigazos ante el jolgorio y la jerigonza de un endecasílabo de espectadores que va a descarrilar de la risa en la próxima curva.
Al día siguiente pintan bastos para los que desmontan la feria trashumante. Huele a establo, a gas metano por la fermentación de la dieta humana depositada en estos 4 días; y a potros desbocados. Hedor, es el nombre del heredero de las letrinas.
Me llevo a una parejita vecina de acampada hasta Bristol. Se me cae el gordo acompañante encima cuando conduzco por la autopista, el armario inglès. Solo es un párvulo borracho. Macagon...le voy a dar...!!!
Un ángel desdentado de nombre Sean, de apellido Mc Gowan, líricanta canta lo mejor de los Pogues y me hace feliz.También tengo la oportunidad de pasar el rato con Amanda King: una madurita de buen ver que es artista y está al cargo de la zona de los peques y a la que conocí en el Mango Landin cuando la ayude a pintar el techo y no podía dejar ed mirarla subida a la escalera que yo sostenía y a sus shorts tejanos, tan cortitos....Una vida aventurera a tope por el mundo overland. Ahora vive en Australia y también está al cargo del Womad de allá.
Todo esto y más en el Womad.
En los puestos hay uno que vende cuerdas vocales y en el "Insect Circus" los hombres domesticados por las cucarachas y las libélulas, hacen alarde de sus acrobacias atravesando aros de fuego crepuscular.
40 gigantescos tambores llegan desde el sol naciente, y las mujeres de Kobayasi se emplean a fondo. Descargan sobre ellos toda su energía con enormes falos de madera. Fluye el magma de las entrañas de la tierra,seminálmente.
Los Èmulo y Rèmulo de Manu Chao y Eric Cantona arremeten con su banda de despellejados en otro "circo globalia".La gente baila sin parar cuando ruge la marabunta. Tambièn hay hombres de la sabana que soplan baobabs y las canciones traen remotos recuerdos de por allá, en el umbral de los tiempos.
Curtis, el feriante de la vanidades, exhibe máquinas que predicen terremotos en otros planetas y "La Gran Betty" escupe tu futuro desde su urna de cristal en un papel mojado.
Un alfeñique con una gran vis cómica sin ser un artista contratado, levanta la pesada maza y la piel estirada de su cuerpo deja ver el saco de costillas, el esqueleto, en la atracción: "Yo Soy El Mas Fuerte". Cuando cae con todo su peso, se le desparraman las fuerzas y las gafitas de Oxford vuelan por los aires entre carcajadas del populacho festivo. La pesa que marca los puntos apenas se eleva unas décimas y la campana se troncha de la risa, tía Felisa.
Un grupo de aspavientos y tragacorcheas deleitan al personal en la noche cernida de estrellas. En otro lugar, un hombre y una mujer se desnudan emocionalmente a latigazos ante el jolgorio y la jerigonza de un endecasílabo de espectadores que va a descarrilar de la risa en la próxima curva.
Al día siguiente pintan bastos para los que desmontan la feria trashumante. Huele a establo, a gas metano por la fermentación de la dieta humana depositada en estos 4 días; y a potros desbocados. Hedor, es el nombre del heredero de las letrinas.
Me llevo a una parejita vecina de acampada hasta Bristol. Se me cae el gordo acompañante encima cuando conduzco por la autopista, el armario inglès. Solo es un párvulo borracho. Macagon...le voy a dar...!!!
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